La finca de San Salvador de Guardiola atrae a cientos de personas al proyecto AMPANS, con conciertos en directo y actividades para todos los públicos
Urpina, San Salvador de Guardiola, 29 de septiembre de 2022. AMPANS ha hecho balance de la celebración de la fiesta de la vendimia solidaria de Urpina que tuvo que dejar de hacerse a raíz de la pandemia, justo cuando había iniciado un cambio de formato. Pese al tiempo inseguro con el que ha empezado el otoño, la finca Urpina se llenó de público, de todas las edades incluso antes del inicio del horario previsto. De esta forma, reeditó el éxito de participación del 2019, cuando la fiesta pasó a ser de formato matinal, por la tarde y la noche para llegar a nuevos públicos. La fórmula dio resultado pero AMPANS no pudo repetir el éxito hasta esta edición, a raíz del paro por el coronavirus.
Durante toda la tarde y hasta medianoche, se pudo disfrutar de música en directo en la plaza de la quesería, desde donde la fundación elabora los quesos Muntanyola. Rodeado de viñedos, el público asistente pudo participar en todas las actividades previstas, vinculadas al vino y juegos para los niños.
La música tuvo gran protagonismo ya las siete y media de la tarde se dio inicio a los conciertos. La cantante y trompetista Alba Careta y el pianista Roger Santacana ofrecieron, en un formato íntimo y elegante, su repertorio de jazz, música catalana y composiciones propias. Les siguieron los también bagencs Retrohit, una banda de versiones de grandes clásicos de soul, funky y rock de los setenta y ochenta.
La cata musicada a pie de viñedo volvió a ser uno de los grandes atractivos de la fiesta. Presentado por el enólogo Joan Soler, entrelazó sus palabras con la música de Laura Muñoz y Joel Diaz. Una actividad de una hora de duración, que había agotado todas las plazas hacía días. La cata se nutrió de cuatro vinos elaborados por la fundación: U, Cor Valent, 3Nits y Gebrada.
Otra novedad destacada de este año fue el taller de Winefulness, guiado por Ester Bach, especialista en bienestar emocional a través del cuerpo, una actividad en la que los participantes conectaron el aquí y ahora, y disfrutaron de una copa de vino, Dos Mans, otro de los vinos de AMPANS, con los cinco sentidos.
Para las familias con hijos, los talleres de arte y vino, y los juegos cedidos por el CAE y dinamizados por equipos mixtos de profesionales y usuarios de la propia entidad, entretuvieron a pequeños y mayores.
El proyecto Urpina de la fundación AMPANS es fruto de una donación hecha en vida por la familia que regentó la finca durante décadas, que se ha mantenido en la casa solariega y ha visto crecer el proyecto a lo largo de los años. Urpina ha permitido generar oportunidades de inserción laboral, a través de la quesería y los viñedos, y el acogimiento residencial de veinticuatro personas con discapacidad intelectual.
La entidad expresa el agradecimiento por el apoyo que ha recibido de sus colaboradores para la organización de la Fiesta de la Vendimia solidaria de Urpina, suspendida por la pandemia, y que ha contado con la colaboración de empresas del territorio como PetroBages, que ha posibilitado la música en directo de la fiesta.