Mindfulness y trastornos alimentarios

El uso del mindfulness para el tratamiento de los trastornos de conducta alimentaría

El mindfulness es una técnica de relajación que enseña a tomar conciencia plena de nuestras emociones. Varios estudios científicos han demostrado los beneficios del mindfulness para el tratamiento de los trastornos de conducta alimentaria.

 

En los últimos años, la práctica de mindfulness (también llamada atención plena) ha ido ganado adeptos. Se trata de una técnica de relajación que enseña a tomar conciencia plena de nuestras emociones y que se basa, principalmente, en:

  1. La auto-observación o exploración corporal, que permite tomar conciencia de nuestras sensaciones.
  2. La meditación, con especial énfasis en el presente y en la conexión cuerpo y mente.
  3. La atención plena en la vida cotidiana, que consiste en prestar atención a todos los pensamientos y sentimientos, sin juzgar si son buenos o malos: únicamente observándolos.
  4. Los estiramientos y / o el yoga.

En los años 70, el Doctor Jon Kabat-Zinn de la Universidad de Massachussets en EE.UU., desarrolló el programa «Mindfulness Based Stress Reduction» (MBSR) (Reducción del estrés basada en la atención plena). Se trata de un entrenamiento en el que se aplica el mindfulness para el tratar ciertas condiciones físicas y / o mentales como vía complementaria a los tratamientos tradicionales.

Desde entonces, el interés en la aplicación clínica del mindfulness ha ido creciendo, por lo que la comunidad científica ha visto la necesidad de estudiar el impacto de esta técnica en diferentes enfermedades o condiciones y, entre ellas, en trastornos alimentarios como la anorexia o la bulimia.

El mindfulness y los trastornos alimentarios

En un estudio publicado en la revista Health Promotion se evaluó el impacto de un programa online de alimentación y mindfulness. Esta iniciativa, llamada “Eat for Life”, tenía como objetivo instruir a personas con trastornos alimentarios en la práctica de mindfulness.

Los autores del estudio distribuyeron de manera aleatoria a los participantes en dos grupos: uno participaba en el programa Eat for life y el otro no.

Pasadas 10 semanas, ambos grupos presentaron diferencias significativas respecto a los síntomas. El grupo que había realizado el programa de alimentación intuitiva basada en mindfulness, tenía 3,65 veces más probabilidades de volverse asintomático, es decir, de no presentar síntomas de trastornos alimentarios en relación al otro grupo.

Cada vez se hacen más estudios que, como éste, evalúan la aplicación del mindfulness en los trastornos alimentarios. Aunque aún se necesitan más datos, se está empezando a ver que las intervenciones basadas en la atención plena en combinación con otras estrategias como terapias conductuales orientadas a la alimentación, son una alternativa eficaz en la mejora de los síntomas.

¿Qué beneficios tiene el mindfulness en los trastornos alimentarios?

Según los estudios, la práctica de mindfulness produce una mejora de los síntomas de los trastornos de conducta alimentaria en los siguientes aspectos:

  • Habilidades en gestión emocional
  • La relación con la comida
  • Percepción propia de las sensaciones corporales, aprendiendo a distinguir entre hambre real y emocional
  • Mejoras en la conducta, con la normalización de los hábitos alimentarios
  • Restablecimiento del peso

Los resultados de todos estos estudios motivan al desarrollo de programas que utilicen este tipo de prácticas para el tratamiento de los trastornos de conducta alimentaria. Sin embargo, los científicos resaltan que son necesarios más estudios que confirmen la efectividad y den pautas para diseñar intervenciones efectivas.

 

Referencias:

Cristina Moreno Amezcua, Cristina Romero Pérez y Agustín Sánchez Gayango. Eficacia del mindfulness en el tratamiento de los trastornos de la conducta alimentaria. Psicoevidencias. (2018)

Qué es la atención plena o Mindfulness. Inica tu práctica y mejora tu vida. Hábitos Exitosos.

David Raya Güimil. Intervenciones basadas en mindfulness aplicadas a trastornos de la conducta alimentaria. Una revisión bibliográfica. Universidad Jaume I. Trabajo Final de Máster. (2016)

Irene Muñoz Carriazo. Práctica del mindfulness en trastornos de la conducta alimentaria a partir de un programa de educación para la salud. Trabajo Fin de Grado de Enfermería. Universidad Autónoma de Madrid (2016)

Eat for life. Lynn Rossy.