La percepción del confinamiento en niños y adolescentes
Un estudio analiza el impacto del confinamiento en niños
La pérdida de libertad y la ruptura de la rutina durante el confinamiento ha supuesto un reto que ha tenido un impacto emocional en todos, también en niños y adolescentes. Pero, ¿cómo viven ellos esta situación?
La pandemia por coronavirus y la situación de confinamiento decretada por las autoridades han supuesto un impacto en el día a día de todos, también de los niños y adolescentes. Durante estos meses, han tenido que comprender y adaptarse a una situación excepcional y muy complicada.
Un estudio llamado Infancia Confinada, ¿Cómo viven la situación de confinamiento niñas, niños y adolescentes? ha analizado el impacto que está teniendo la pandemia por coronavirus en los niños españoles.
El objetivo del estudio ha sido conocer cómo están viviendo las niñas y niños la situación de confinamiento e «invitar a niños, niñas y adolescentes a expresar sus principales preocupaciones».
La metodología utilizada ha sido la selección de 425 niños y niñas de España entre 8 y 17 años que están viviendo la situación del confinamiento. Los investigadores han elaborado un cuestionario en línea con respuestas abiertas.
Los resultados del estudio muestran como la mitad de los encuestados (50,37%) han manifestado «miedo» por la COVID-19, seguido del «miedo a que el coronavirus afecte a los familiares o amigos». También se ha mostrado una inquietud por la situación económica y por la duración del confinamiento. Además, el 60% de los participantes coincidieron en responder: «¡Que se acabe esto ya!».
El aburrimiento también ha sido un factor recurrente: el 61,6% afirma haberlo experimentado a diario o casi a diario. Por otra parte, sin embargo, la gran mayoría de los niños y adolescentes (94,6%) son conscientes de la necesidad de quedarse en casa para frenar la propagación del virus.
Como conclusión, los investigadores apuntan que esta situación tan excepcional parece tener un impacto muy significativo en las vidas de niños, niñas y adolescentes. Los niños han demostrado una capacidad de resistencia muy grande, pero con un coste elevado en cuanto a las emociones y reacciones hacia la pandemia. El miedo a la muerte y la enfermedad, recoge el estudio, «puede tener consecuencias en un futuro».
Referencias