Un tercio de las personas con discapacidad intelectual presentan trastornos de la conducta asociados a la discapacidad y/o a la enfermedad mental. Las alteraciones de la conducta acontecen uno de los principales retos que tienen que afrontar los profesionales y los servicios que apoyan a las personas.
Los organizadores del Congreso han definido un programa para abordar y compartir conocimientos desde todos los ámbitos de intervención, sanitario, atención directa y enseñanza, sobre conceptos, modelos, planificación, intervenciones y técnicas que mejoren la calidad de vida de las personas con trastornos de conducta.
Más de 600 personas, profesionales de los ámbitos de la salud, la atención directa y la educación asistieron a la última edición de congreso. El objetivo del congreso fue identificar y satisfacer las necesidades de salud mental y de las conductas que preocupan a las personas con discapacidad intelectual de elevada complejidad mediante terapias psicológicas.
Licenciada en Psicología por la Universidad Autónoma de Barcelona (UAB), doctora en Psiquiatría y Psicología Médica (UAB), máster en Neuropsicología y Neurología de la conducta (UAB) y postgrado en Neuropsicología y Neurología de la conducta infantil (UAB).
Su labor asistencial se ha desarrollado, en primer lugar, en el campo de la psicogeriatría y, posteriormente, en el ámbito del trastorno del desarrollo intelectual.
Biza Stenfert Kroese es profesora titular de psicología clínica en la Universidad de Birmingham.
Responsable de servicios de psicología clínica para personas con discapacidad en la Dudley Priority Health de la NHS.
Licenciado en medicina por la Universidad Autónoma de Barcelona y especialista en psiquiatría.
Ha desarrollado su trabajo asistencial en el campo de la psiquiatría general en personas adultas, la psicogeriatría y la psiquiatría de las personas con discapacidad intelectual.
John Rose es psicólogo clínico especializado en personas con discapacidad intelectual.
Desde la Universidad de Birmingham estudia la efectividad de las intervenciones cognitivo-conductuales en personas con discapacidad intelectual que presentan conductas de ofensa sexual.
