Estimadas personas usuarias, profesionales, familias y colaboradores nuestros, ante este momento tan insólito que vivimos, tenemos la necesidad de trasladar unas palabras de ánimo y de apoyo para afrontar este gran reto que la pandemia del coronavirus nos ha presentado de forma global y que apela a una respuesta conjunta y solidaria de todos. En estos momentos difíciles, queremos nuestras primeras palabras a los usuarios ya las familias por la rápida adaptación a la situación que ha mostrado ya desde el inicio cuando suspendimos las actividades externas, las visitas, las escrupulosas medidas de prevención y de higiene, la limitación de accesos. También cuando, atendiendo a una decisión personal y en la medida de sus posibilidades, algunos decidisteis pasar el confinamiento junto con sus hijos o hijas o familiares, a sus domicilios privados. Esto ha permitido a nuestros profesionales replegarse y distribuirse en equipos que se relevante, para concentrarse en atender a las personas residentes en AMPANS, cerca de cuatrocientas, las 24 horas del día. Preservar su salud y la de nuestros profesionales que los acompañan día y noche, es ahora nuestra prioridad. La nuestra siempre ha sido una entidad valiente que se ha caracterizado por la visión de futuro y una rápida adaptación a los cambios. Haber apostado por profesionales formados, responsables e implicados, ha facilitado una rápida reacción y adaptación de todos nuestros departamentos y servicios asistenciales y laborales, vertidos y entregados para afrontar la situación. Esta sin embargo, es una crisis para la que nadie estaba preparado, ya pesar de todo, el equipo de AMPANS, entre los que nos contamos, está enormemente comprometido y hace todo lo que está en sus manos para que todo vaya bien. En este sentido, el comité de crisis formado por el equipo directivo de AMPANS, aparte de seguir y aplicar todas las directrices administrativas para luchar contra esta crisis, diseñan e implementan medidas propias de prevención y preservación tanto de la salud de las personas usuarias como de los profesionales. Una de las primeras decisiones adoptadas fue proteger a las personas con patologías previas o con un estado de salud delicado, tanto entre las personas usuarias como entre los profesionales, y reservar aquellos profesionales con hijos pequeños o a cargo o que conviven con personas vulnerables. Se organizó un contingente de personal disponible de otros servicios diurnos de AMPANS para poder afrontar las bajas ocasionadas por posibles contactos de coronavirus, y seguimos haciendo selección de personal en previsión de poder atender en condiciones a los servicios residenciales y los hogares. Esta es una de las principales complicaciones con la que nos encontramos los servicios residenciales, y es posible que necesitemos ayuda de voluntariado a medida que avancen los días y la crisis sanitaria se agrave, como apuntan las previsiones. A las posibles bajas de personal, la otra preocupación de las entidades es la falta de equipos de protección individual (EPI). En este sentido tenemos que hacer un agradecimiento especial a las decenas de personas que han contactado con la entidad para facilitarnos especialmente mascarillas de ropa. Previsiblemente nos harán falta más dado que la crisis se prevé larga. Dicho esto, la falta de mascarillas quirúrgicas y otros materiales específicos de protección es normal dentro del sector de servicios residenciales para que nuestro día a día no implica usar materiales que son propios del sector médico, y en los que, tristemente, también escasean. También queremos agradecer el esfuerzo continuado de los Departamentos de la Generalitat, especialmente, el de Salud y el de Trabajo, Asuntos Sociales y Familias de la Generalidad de Catalunya que gestionan de forma muy profesional y efectiva esta grave crisis. También agradecemos a Dincat que nos permite estar permanentemente informados y coordinados en las actuaciones que tendremos que aplicar. Los profesionales de AMPANS son personas de valores, entregadas y valientes, tanto como otros colectivos que asimilamos a personas que, por su oficio, están al frente de esta lucha, y que aplaudimos merecidamente, cada día, como héroes. A todos y cada uno de vosotros, todo nuestro reconocimiento y agradecimiento. La salud de las personas es la prioridad absoluta y es donde la entidad está concentrando todos sus esfuerzos. Sabemos que más tarde o más temprano, esta crisis sanitaria se acabará o disminuirá significativamente, pero la dificultad de prever qué pasará en los próximos meses, supone un problema organizativo y económico grave. Los proyectos comerciales que hemos ido consolidando a lo largo de los años con gran esfuerzo y dedicación, ahora han tenido que bajar la persiana, y algunos departamentos de la entidad han tenido que interrumpir la actividad. Tras valorar diversas salidas, la entidad se acogerá a un Expediente de Regulación Temporal de Empleo (ERTE) como un instrumento gubernamental que nos permitirá aligerar la carga salarial de las plantillas de estos servicios, y garantizar la conservación de los puestos de trabajo cuando todo vuelva a la normalidad, que deseamos sea lo antes posible. A todos, animaros. Esta lucha la vamos a ganar habiendo aportado todos, nuestros sacrificios personales. No podemos terminar estas palabras sin hacer un agradecimiento explícito al personal sanitario que, como nuestros profesionales, cuidan de nosotros, y todos vosotros -los que podáis- quedaros en casa. Salvando las distancias, si ya aprendimos de la crisis de 2008, de esta también nos levantaremos y el camino de responsabilidad que habíamos empezado a emprender entre todos, volverá con más fuerza, más conscientes de nuestra vulnerabilidad, pero también de lo que es verdaderamente importante y de lo que es verdaderamente prescindible. Gracias Patronato de la fundación AMPANS