Albert Manso, sous chef del restaurante Tickets, en la cocina del Canonge junto a Oriol Serra El Canonge, restaurante que tiene detrás la fundación AMPANS, se presenta como una oferta gastronómica consolidada en Manresa, con un enfoque totalmente renovado, con ampliación del equipo y nueva carta. Logrando una nueva línea gastronómica bajo la guía del jefe de cocina Oriol Serra y con el objetivo de ofrecer una experiencia innovadora a los comensales, este restaurante está trabajando en una propuesta que ha hecho que Manresa reciba la visita de chefs de alto prestigio como Albert Manso, sous chef del rompedor local barcelonés Tickets y que ahora forma parte del equipo de Albert Adrià, y las colaboraciones de Mateu Casañas, Oriol Castro y Eduard Xatruch, de los emblemáticos restaurantes Compartir y Disfrutar, en Cadaqués y Barcelona respectivamente, y el chef y fundador del restaurante Ca l’Amador Diego Alías. Diego Alías, chef de Ca l’Amador, con el equipo de cocina del Canonge Fieles a su compromiso con las personas y el territorio, en esta nueva propuesta gastronómica el Canonge ha presentado una nueva carta, que incluye las aportaciones de estos chefs. Cada uno de ellos, de forma solidaria y aportando ideas y talento, ha trabajado conjuntamente con el equipo del restaurante manresano para sumar su nombre a este proyecto, que tiene su origen en la inclusión sociolaboral de personas con discapacidad intelectual. Así, sus creaciones se encuentran en la actual oferta del restaurante y ya se pueden degustar. Plato de la carta del Canonge «Ou de polleta», cedido por el equipo de los restaurantes Disfrutar (Barcelona) y Compartir (Cadaqués) Para acompañar los nuevos platos, se puede brindar con una original lista de cócteles ideada por la maître del Canonge, Eva Lazo, que ha apostado por ingredientes de cosecha propia tan sorprendentes como los vinos Urpina, la cerveza Ètika o los quesos Muntanyola, de la fundación AMPANS. Nuevos espacios y detalles, son también algunas de las novedades que se encontrarán los clientes de este restaurante que ocupa a 16 personas, el 50 por ciento con discapacidad intelectual.